miércoles, 28 de marzo de 2012

Mi primera huelga



Hoy oyendo los informativos sobre la huelga general me ha venido a la memória mi primera huelga.
Fué como es lógico por mi edad en 1968. Movidos por los aires que venían de Europa a las universidades españolas.
Quedamos  el grupo de amigos en La Alameda, emocionados, con los bocatas como si de un picnic se tratara,  creyendo que ibamos a salvar el mundo con nuestra acción. aún no hacía 5 minutos que parabamos allí, cuando apareció un grupo de maderos y con las porras y sin mediar palabra nos dieron una de palos y porrazos que nos dejaron tiesos, con sus buenos modos de caballeros calentaron bastante más a los chicos que a las chicas, a nosotras nos dejaron para el final, pero a ellos por lo visto los golpes los ponian a cién, porque  con cada estiron de orejas y pelos aprovechaban para arrancarnos las faldas o la camiseta y pegarnos algún pellizco en las consabidas partes.
Total cuando empezaba la huelga nosotros ya la habíamos terminado, nos fuimos a casa de uno del grupo que en aquel entonces por ser de pueblo vivía en un piso de alquiler, allí nos reconpusimos del soponcio y nos preparamos para la segunda parte. Ahora nos faltaban los palos de casa.
Que tiempos aquellos tan lejanos y hoy  siento tan cercanos.
Los años no son los mismos, pero la história se repite, tal como hacian en aquella epoca nuestros padres tambien hoy lo hemos hecho nosotros.- No vayas que no te conviene.
Que pronto  y que rápido se van los impetus de la juventud. Hoy ya no creo en la huelga como método para solucionar esto, los tiempos cambian debe haber alguna otra manera de hacerlo, sin que pierdan siempre los mismos.

Des-aprender



Preparando un programa para mi trabajo basado en la educación por proyectos. He encontrado la palabra, Des-aprender.
Es un término comprensible y accesible para cualquiera. Analicemos. ¿Lo que hemos aprendido nos ha servido?
Nos han educado en los pilares del bienestar: Estudiar, trabajar,  posición, dinero...
Esa era  la meta.

Qué desilusión cuando los universitarios están en el paro o haciendo trabajos que no son para nada lo que se había pensado para ellos,cuando el estado del bienestar se tambalea, cuando el miedo campa a sus anchas por todos los rincones de la sociedad, cuando los sueldos son paupérrimos.

Realmente estamos en el momento oportuno para des-aprender. Vaciar de contenidos todo lo aprendido y llenar nuestro corazón de cosas nuevas. Pensar que somos capaces de reinventarnos, que la vida no es lo que nos habían enseñado.

Tendremos que aprender una nueva. Si somos capaces de conseguirlo, le habremos ganado la partida a esta época que tanto nos ha quitado... o dado...quien sabe???

miércoles, 14 de marzo de 2012

La crisis


Hemos entrado en una crisis de consecuencias impredecibles. La creencia de que estábamos seguros, se ha desmoronado. El dinero que sale del Estado es para los bancos. La voracidad y ambiciones de unos pocos desaprensivos son el pan nuestro de cada día.

Yo os propongo que ante esta situación tan desalentadora, le pongamos cara solidaria, pensemos en otros, a lo mejor mirar hacia atrás nos ayuda. Hay tantos niños el en mundo que no han sabido nunca ni sabrán la palabra crisis porque no la conocen, sin embargo conviven todos los días con la palabra. Hambre.

Para nosotros el sufrimiento que nos produce esta crisis se llama deseo. De tener, de viajar, de conseguir, El de ellos se llama necesidad. El nuestro es muy sencillo de solucionar. No desear el de ellos muy difícil de arreglar porque dependen de nosotros y de que cambiemos el deseo de poseer por el de dar.

Identificamos la felicidad con el dinero, ellos solo con llevarse algo a la boca ya son felices,No sabemos vivir de manera más liviana y eso hace que se instale en nosotros la frustración. Os invito a reflexionar, y veréis cuan afortunados somos y que cantidad de cosas tenemos a nuestro alrededor, quizás solo nos falte la voluntad de dar para sentirnos realmente felices.

Seamos personas ante las adversidades demos y sentiremos una satisfacción que no es comparable a ninguna otra. La peor crisis es la que se rodea de mezquindad y de insolidaridad.


sábado, 10 de marzo de 2012

Tiempo libre










Fin de semana.





Desde que dispongo de mi tiempo, no se lo que es el fin de semana, para mí todos los días son iguales. Parece al contarlo que es una época de monotonía o aburrimiento. Nada más alejado de la realidad. Disponer del tiempo propio es una de las mejores maneras de vivir. Solo he conocido una persona cercana que lo ha podido hacer gracias a su fortuna y sus ganas de ser libre. Sus signos externos, nulos. Ha tenido que soportar por parte de la gente la insidiosa persecución a la que someten los mediocres a aquellos que se salen de las normas. Si era un enfermo mental, si había estado perseguido judicialmente. Una sarta de barbaridades e incongruencias de las cuales el ha estado ausente. Mientras los demás sufríamos la presión del trabajo, él leía, fotografía, cine, viajes... Eso para mí es ser rico. HACER LO QUE TE DE LA GANA, SOLO TENER LAS OBLIGACIONES QUE TÚ TE IMPONGAS. Pero que difícil es conseguirlo, en su caso la suerte de pertenecer a una familia que le dio lo suficiente para vivir así. En el nuestro la voluntad de no perder tu vida, con lo corta que es, sometido a un trabajo o a una presión social que te lo niega. En su caso suerte en el nuestro ganas.

jueves, 8 de marzo de 2012

Día de la mujer



Hoy le dedico este día a mi abuela. Mi dulce y recordada abuela. Yo empecé a compartir parte de mi vida con mí abuela, a partir de los seis años. Los recuerdos se agolpan en mí mente como sí hubiesen pasado hace escasamente un año. Vivia en pueblecito de montaña, casa típica donde al fondo había un corral con los animales, nos acompañaban 4 perros de caza, unos cerdos, muchas gallinas y esporádicamente alguna ovejo o cabra que estaba enferma y bajaban de la montaña para cuidar, a más de un hurón al que me tenía prohibido acercarme, según ella era un animal poco dado al afecto y maloliente. Cuando descubrí a posteriori que se había convertido en animal de compañía en nuestra época, pensé para mis adentros. " Si mi abuela levantara la cabeza".

Ella nunca reinvindico sus derechos, consideraba normal lo que hacía; críar hijos, cocinar, lavar la ropa un día por semana en el lavadero, aguantar a mi abuelo cuando venía de mal humor... no se si estaba frustrada o no con su vida de ama de casa. Pero ella buscó otra manera de vivir, la montaña, allí pasabamos horas buscando plantas, oliendo flores, mirando los almendros en flor, cojiendo hojas de palmitos para hacer cestas, las horas se nos iban por los caminos, a veces llegabamos tarde a casa y ya mi abuelo y los vecinos se arremolinaban ante la puerta, ella a eso no le daba importancia, su frase siempre era ¿ Y lo bien que lo hemos pasado?
Trabajó mucho, reía sin parar, contaba historias inventadas, curaba con medicina natural, guisaba con los productos del campo, había sido emigrante en Argel, pintaba las uñas de maravilla y te hacía dibujos en los brazos, le encantaba estar conmigo, me besaba, me abrazaba y me cantaba mientras yo como niña que era le peinaba una y mil veces su larga trenza.
Era una mujer libre.
Las personas  damos o privamos de libertad, estoy segura que han habido tantas mujeres libres como las hay ahora o quizas más porque el actual sometimiento , no es del hombre es de la propia mujer, nada hemos conseguido mientras seamos esclavas de la nueva tiranía que nos hemos impuesto. Ser perfectas aún a costa de nuestra salud.

martes, 6 de marzo de 2012

LA SEQUÍA

Muy señores y señoras mias. Acabo de oir la noticia que estamos secos, desde hace un tiempo a esta parte debería convertirse en la  palabra fetiche. Sequía en las arcas, sequía en los sueldos, sequía en los servicios públicos, sequía en la alegría, todo el mundo anda crispado, los problemas con los que todos los días nos desayunamos producen un vértigo indescriptible. Nadie sabe al salir de casa que va a ser de él ese día.
De todas las sequías que nos rodean la peor es la risa, esa que nunca deberiamos perder. Es tan corta la vida, tan insegura, tan imprevisible, que todo lo que ella nos ofrece sea bueno o malo lo deberiamos tomar con una gran carcajada.
Porque nada es más cómico que pasárnosla lamentadonos cuando sin saberlo y le da la gana nos la quita. Por lo tanto amigos riamos a pierna suelta, tal vez hasta provoquemos la lluvia